Trump confió en que puedan alcanzar un acuerdo 'muy rápido'. 'Nos conocemos y sabemos qué quiere cada uno de nosotros', dijo durante el encuentro al margen de la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean) celebrada en Malasia. 'Creo que llegaremos a un acuerdo con Brasil. Nos llevamos muy bien', agregó.
El presidente estadounidense señaló que ambos países tienen 'mucho por ofrecer', lo cual –dijo– 'es bueno para los dos'.
Optimismo
Lula posteó en su cuenta de la red social X: 'Abordamos la agenda comercial y económica bilateral con franqueza y de forma constructiva. Acordamos que nuestros equipos se reunirán de inmediato para buscar soluciones a los aranceles y las sanciones contra las autoridades brasileñas'.
En tanto el canciller de Brasil, Mauro Vieira, calificó la reunión entre el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, de 'excelente'.
'Fueron más de 45 minutos de conversación muy positiva, muy productiva', dijo el ministro, agregando que los presidentes trataron todos los temas previstos.
Lula 'renovó el pedido brasileño de suspender los aranceles impuestos a la exportación brasileña durante el periodo de negociación, así como la aplicación del recurso Ley Magnitsky, y dijo estar listo para dialogar', detalló Vieira.
Instrucciones
Según el canciller, Trump estuvo de acuerdo en 'una negociación rápida y que durante ese periodo habrá suspensión' de los aranceles. 'Vamos a tener negociaciones, conversaciones encaminadas a la suspensión de los aranceles teniendo en cuenta que son aplicadas a un país que no tiene un superávit con Estados Unidos, pero sí un gran déficit', dijo.
Además, informó que el mandatario estadounidense 'declaró que dará instrucciones a su equipo para empezar un proceso, un periodo de negociación bilateral que debe iniciar hoy mismo'.
El pasado 9 de julio, Trump anunció aranceles de 50% para Brasil sobre la base de lo que definió como una relación comercial 'muy injusta' y señalamientos hacia la Justicia brasileña por la condena al expresidente Jair Bolsonaro, por intento de golpe de Estado.
Esos gravámenes comenzaron a regir desde el pasado 7 de agosto. A pesar de que hay una lista con casi 700 excepciones, se incluyen varios artículos importantes para la economía brasileña, como el café, la carne de res y frutas como el mango.


