Desde la acción política, la academia, la empresa, el sindicato o el periodismo, hemos dejado pasar una y otra oportunidad de ponernos de acuerdo sobre cuestiones básicas, las famosas “políticas de Estado” de las que solemos llenarnos la boca pero que hemos sido incapaces de consensuar, postergando su discusión por disputas mezquinas y cortoplacistas de posicionamiento y olvidando que quienes sufren las consecuencias de los desacuerdos de los sectores dirigentes de una sociedad son siempre los más débiles, los que más necesitan de una dirigencia responsable.

El domingo se manifestó la frustración de la generación de nuestros jóvenes, pero también la de mucha gente que está harta de que no nos hagamos cargo. A eso se le sumó el jueguito irresponsable de los especuladores del voto que, como el tero, gritan en un lado y ponen los huevos en otro, práctica hipócrita que signa el accionar de una buena parte ya no de la dirigencia sino de gran parte de nuestra generación.

Convertir el voto del domingo en un voto útil es el gran desafío que tenemos en estos dos meses que quedan de cara a octubre. Lo que pasó debe convertirse un llamado de atención tan fuerte que nos saque de la irresponsabilidad, que nos haga tomar conciencia de lo que está en juego y nos mueva a preguntarnos, sinceramente, si queremos tener un destino común. Si somos un pueblo que siente al otro como hermano. Si compartimos una identidad y estamos dispuestos a trabajar juntos por la democracia, la república, la justicia social, la solidaridad, el desarrollo armónico, el federalismo, o si, por el contrario, nos bancamos un país en donde cada uno se salve como pueda y el que no pueda que se ahogu e en las turbulentas aguas del mercado.

No es esta última la Argentina con la que San Martín soñó. Hagámosle el homenaje que se merece. Defendamos la Patria entendiendo que, si no sabemos leer lo que nuestro pueblo nos dijo, seremos una generación que pasará a la historia sin gloria y con mucha pena.

*Presidente de la Fundación Diálogos Estratégicos y Vicepresidente del Partido Avancemos por el Progreso Social.